Con el paso del tiempo, el cuerpo cambia, pero eso no significa que el deseo de sentirse bien con uno mismo desaparezca. Cada vez son más las mujeres mayores de 50 que deciden realizarse una cirugía de senos, ya sea para levantar, reducir o mejorar la forma de su busto. La edad no es una barrera, pero sí es un factor que requiere una valoración médica detallada y una planificación quirúrgica cuidadosa.
Después de la menopausia o tras cambios importantes de peso, es común notar una pérdida de firmeza, mayor flacidez o cambios en la forma del busto. En muchos casos, el deseo de armonizar el cuerpo, recuperar seguridad o simplemente sentirse mejor con su apariencia lleva a muchas mujeres a considerar un procedimiento de cirugía mamaria. Los procedimientos de senos más comunes son:
Aunque no hay una edad límite para operarse, sí hay aspectos que deben tenerse en cuenta con mayor cuidado:
Uno de los mayores beneficios de operarse a esta edad es que la decisión suele tomarse desde un lugar de mayor autoconocimiento y madurez emocional. Es común que las expectativas estén más enfocadas en el bienestar personal que en estándares externos.
Los resultados son completamente personalizados, y gracias a tecnologías actuales y protocolos avanzados, la recuperación puede ser cómoda y segura, siempre que sigas las recomendaciones postoperatorias.
En consulta de valoración evaluaremos tu salud, tus expectativas y diseñaremos un plan quirúrgico que te permita lograr una transformación natural, segura y acorde a tu estilo de vida. Agenda tu valoración con nosotros y da el primer paso hacia una versión de ti que te haga sentir mejor por dentro y por fuera.